Hoy hablamos de ... PICNIC

¡Hola jugones!

Esta semana venimos una entrada más cortita de lo habitual, y es que tenemos entre manos un juego bastante sencillito y que se une al numeroso grupo de juegos en los que poner a prueba nuestra rapidez visual: PICNIC.

Autor: Martin Nedergaard Andersen

Nº de jugadores: de 2 a 6

Edad: a partir de 8 años

Duración Aprox: 15 minutos

Editorial: DEVIR

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COMPONENTES

1 Manual de reglas: El manual más sencillo y corto que he leído nunca.

90 Cartas: Cartas en formato redondo que tienen dos lados diferentes. Muestran números que van del 1 al 5 sobre manteles (palos) de distintos colores y tipos de comida.

COMO SE JUEGA

El objetivo en Picnic es deshacernos de todas nuestras cartas antes que el resto de jugadores. El primero que lo consiga será el ganador de la partida.

Para empezar una partida, barajamos las cartas y ponemos una en el centro de la mesa al alcance de todos los jugadores y repartimos el resto de cartas a partes iguales entre los jugadores.

Una vez repartidas las cartas, cada uno de los jugadores elegirá un palo que corresponderá a un tipo de comida y color. Una vez tengamos claro el palo con el que jugaremos, empezaremos la partida. 

Para ello, damos la vuelta a la carta central y empezamos a jugar. En Picnic no hay turnos, por lo que todos los jugadores jugarán sus cartas al mismo tiempo.

Para poder colocar una carta nos tenemos que fijar en el número de nuestro palo de la carta central y colocar una de nuestra mano con el número inmediatamiente superior, es decir, si yo juego con el palo de las bebidas y en la carta central, en mi mismo palo, hay un 4, yo tendré que buscar entre mis cartas una bebida con el número 5. El número que seguiría al 5 sería el 1.

De este modo, los jugadores irán jugando cartas lo más rápido posible hasta descartarse de todas sus cartas. El primer jugador que lo consiga será el ganador de Picnic!

CONCLUSIONES

Picnic es un juego familiar y que viene muy bien para jugar con niños. 

Si eres una persona con buena rapidez visual, seguro que disfrutarás jugando pero si, por el contrario, eres de los que carece de esta habilidad, puede llegar a ser un juego frustrante.

Lo mejor que tiene es que es un juego muy portable, sencillo de explicar y rápido de jugar, por lo que es de esos juegos que pueden ver mesa con facilidad.

Lo peor es su competencia. Por formato de lata y cartas, a todos nos vendrá a la mente Dobble, un juego en el que también tendremos que ser rápidos para colocar cartas con símbolos comunes, pero que le añade un extra con una serie de sencillos minijuegos distintos que vienen explicados en las reglas. 

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